*Escuela Secundaria
General No. 1 en decadencia...
*Director Ezequiel
Amaya Valtierra principal responsable...*Sub Director Marco Antonio Ortíz Ávila remedo de cacique...
*Persecución contra alumnos y maestros abiertamente...
EN
DECADENCIA: Es lamentable tener que observar cómo ha ido en detrimento la
imagen de la tradicional Escuela Secundaria General No. 1 "Lic. Benito Juárez",
ubicada sobre la calle Rincón del populoso Barrio de San Marcos, misma que por
varios años conservó el estatus de institución educativa de primera, aún por
encima de colegios particulares; porque como se recordará, era un peregrinar y
hacer largas filas, así como ver toda clase de funcionarios de alto nivel en la
entonces Secretaría de Educación Pública, cuando todavía no se centralizaba la
educación a cada Estado, todo con el único objetivo de conseguir a cómo diera
lugar un lugar o espacio para sus hijos; obvio, que por la categoría que
mostraba dicho plantel en todos los aspectos, comenzando por grandes Directores
que pasaron por él, como el Profesor Candelario Ramos y Ubaldo Oropeza, sólo
por mencionar algunos; pero que sin lugar a dudas difícilmente retomará el
lugar que le pertenece ese plantel, mayormente cuando llegan a la Dirección
toda clase de bribones, arribistas y recomendados para terminar de darle en la
madre a la institución; por desgracia, en la actualidad esa secundaria, que
quiero demasiado por ser egresado de ese plantel, de ninguna manera parece ser
una escuela, sino mejor dicho, emula a una penitenciaría donde se resguardan a
delincuentes de alta peligrosidad, sobre todo en lo que concierne al turno
vespertino, el cual se les ha salido de control y permiten toda clase de actos
vandálicos; y peor aún, es que Ezequiel Amaya no puede con el paquete, por lo
que para despistar a profesores y padres de familia sobre su desempeño que ha
dejado mucho qué desear, arremete de manera personalizada contra algún alumno,
culpándolo de todo lo que sucede en el plantel que él mismo ha destruido con su
actitud pasiva e incapacidad para estar al frente de una escuela tan importante
como lo es la Secundaria General No. 1 . . . ÚNICO RESPONSABLE: Al hablar de
Ezequiel Amaya Valtierra nos referimos a una persona cuya conducta no es la
apropiada para desempeñar una función tan relevante como poner en sus manos la
integridad de menores de edad, así como el desarrollo y aprendizaje de los
mismos, quien por cierto no crea usted que arribó a la dirección de ese plantel
por méritos propios, sino porque era protegido del entonces encargado del
Departamento de Secundarias Mario Enrique Ruíz Esparza Murillo; sobre todo por
delegar funciones en gatos inferiores para que éstos sean los ejecutores,
porque hasta con eso hay que lidiar con este sujeto, de ser un cobarde para
esconderse sobre sus propias decisiones, o simplemente requerir de esbirros
como testigos a un lado de él para cualquier situación que se le presenta
comprometedora, como el hecho que algún padre de familia le haga algún reclamo
por la manera en cómo se dirige con los alumnos, misma que es agresiva,
hostigadora, acosadora y persecutora; porque ha de saber usted señor lector,
que este pelandrún y pelanas cualquiera ya que se propone a personalizar una
guerra contra alumno específico, no lo suelta; incluso, responsabiliza a éste
sobre cualquier hecho que se presente en la escuela, ya ni siquiera en el salón,
porque es su palabra contra la del alumno; obvio, que es demasiada ventaja y
abuso ponerse al tú por tú con menores de edad, acosándolos como si fuera
interrogatorio de la Policía, mediante presión psicológica hasta que el alumno
manifieste lo que Ezequiel Amaya Valtierra quiere escuchar para cerrar el
asunto y de esta manera, según él, encontró al culpable . . . ACHICHINCLE
LAMEBOTAS: Otro que ha hecho lo propio para quedar muy bien parado con su jefe
inmediato, es un sujeto neófito, que por cierto ha sido despedido de varios
planteles educativos, ¿porqué será?, se trata del profesor improvisado Marco
Antonio Ortíz Ávila, dizque Sub Director de la misma escuela secundaria, es
otro personaje tristemente célebre que se ha caracterizado por pretender dar
una imagen de recto y disciplinado, o como él mismo lo dice: "Profesional
de la educación", cuando ha quedado de manifiesto que este sujeto salido
de la nada, ahora refugiado en la secundaria general No. 1, no entiende el
significado de la palabra profesional, mucho menos de educación; debido a que
si las alcanzara a comprender en su mínima parte, no estaría haciendo el ridículo
haciendo "rondines", como también así lo llama él, sobre cada aula y
anotar en su libretita lo que desde luego le conviene a sus intereses, sólo
para llamar la atención pública; o ¿qué acaso no confía en el desempeño y
compromiso de los mentores que laboran en ese plantel?, porque si es así, la
situación es muy fácil, sólo basta con efectuar una depuración de aquellos
malos elementos y de una vez por todas terminar con el problema, para así ya
dejarse de ridiculeces; cabe hacer énfasis en que este sujeto desequilibrado,
suele dirigirse hacia los alumnos con toda clase de insultos y ofensas;
incluso, existe el dato sobre la vejación que fue víctima un menor de edad con
capacidades diferentes, al gritarle toda clase de estupideces propias de los
salvajes orates como él, tratando de imponer la voluntad de este par de
directivos que sólo sirven para dos cosas, para nada y la otra usted ya la
conoce . . . PERSECUCIÓN: Si en algo se han caracterizado este par de sujetos
que malamente están allí, es por ejercer una doctrina fascista, basada en la
imposición, como el hecho de no tomar en consideración la opinión de aquellos
que si son auténticos profesionales de la educación, nos referimos a las
personas que se encuentran frente a grupo impartiendo clases y no están tras un
escritorio mamando de la ubre presupuestal, cobrando miles de pesos por hacer
nada, sólo delegar funciones en gatos inferiores que también les hacen
caravanas; ya nos podemos imaginar el berrinche por el que está atravesando
Ezequiel Amaya Valtierra, al no haber sido designado secretario del sindicato
de maestros aquella persona de la cual éste se inclinaba, porque ahora resulta
que también se quiere sentir remedo de cacique, al igual que si achichincle
mayor, el sub director Marco Antonio Ortíz, ambos cobardemente tomaron la
decisión de modificar una estrategia de no tomar en cuenta a los docentes, sino
que avisaron a los alumnos que serían los maestros quienes cambiarían de aula y
no ellos; esto, pese a que ya se había aprobado con anterioridad la negativa de
mentores, pero como es la costumbre abusiva de Ezequiel Amaya y compañía,
faltando un cuarto para las doce, como auténticos cobardes, avisan del cambio a
los escolares y no a los maestros; esperemos que en realidad haya cambios, como
tanto lo han prometido las autoridades . . .